martes, 13 de febrero de 2007

Comparaciones que se hacen

A veces me causan curiosidad las comparaciones que se hacen entre hombres y mujeres, y porque no, entre mujeres y hombres.
Algunos se los toman con humor: “ Mi esposa me pidió mas espacio. ¿Te mudaste?. No, le alargué el cable de la plancha” . “¿Qué guarda una mujer en un frasquito de azafran?. El cerebro del esposo”.
Otras ponen en un pedestal a las mujeres. Las idolatran, las veneran, que terminan enamorándose de los senos de la mejor amiga, la cola de la vecina, y cuando menos se dan cuentan repudian a los hombres y se hacen lesbianas.
Después los hombres que les gustan los hombres. Y los hombres que gustan de las mujeres pero tambien de los hombres. Y las mujeres que tambien gustan de su vecino, pero tambien de la esposa de su vecino.
Me entretienen las caricaturas machistas. Llegué a la conclusión que son proyecciones de los mismo ideales machistas que esconden un hombre debilucho que usa slep rojo y que lo tienen a los sopapos.
Lo mismo me generan las femenistas. Mujeres resentidas. Pero me pregunto (me vino a la mente una canción) ¿Y qué si Dios fuese mujer?.
Es la lucha de los sexos para saber quien es superior. Quien tiene el poder de pisar al otro. Quien llega mas lejos.
Sin embargo siendo tan diferentes los hombres y las mujeres, se complementan, no en vano esta la frase: “Mi media naranja”.
Pero volviendo al parrafo anterior, me gustaría remacar las diferencias entre los hombres y las mujeres a lo largo de su vida.

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